martes, 12 de junio de 2012

Cap. IV – Despertar 3ra Parte.

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Continuación Cap. IV


...Cuando Cristóbal despertó de su sueño estaba en uno de los bancos de piedra a su lado esta Yuri un hombre joven de mas o menos 24 años, caucásico de 1.78 de altura, rubio con ojos color negros vestía muy moderno yins, camiseta y tenis blancos y una gorra color azul de los yanquis, también estaba recostado echando al siesta en otro banco…
- Vaya, no era que no tenías sueño y te dormiste como una piedra, jaja – le dijo Yuri entre risas
- Calla – le censuro Cristóbal – que estamos cerca del salón principal,
- vamos, solo fue una broma…
Unos quejidos lastimeros de mujer se sintieron a lo lejos
- …bueno, tal vez no estamos para bromas, así que el vampiro Marius!!!  
-  Que con él – dijo todavía perezoso Cristóbal
- Bueno… que te ha dicho
- nada
- Nada… no te creo… bueno!!! y vas a tener el valor de enfrentártele cuando llegue el momento
- no va haber necesidad de eso – dijo enojado Cristóbal – el nunca haría nada por liberarla o hacernos daño
- mmmm, Tiaho no dice eso y doña Carminda lo confirma
- pues yo digo que no
- ja ja ja esta bien no te enojes, si quieres puedo hacerlo yo: si me dieras…
- No!!! Yuri no te daré nada del señor Marius
- bueno… yo solo quería ayudarte nada mas.. y mira la hora que es no tienes que ir por el a la rivera del río – dijo Yuri algo divertido mirando su reloj
- tu costoso reloj no sirve en este lugar!!! – dijo Cristóbal alzando la voz
- Pero ya es tarde - dijo un señor que estaba echado el banco sobrante y que había permanecido dormido hasta que le despertaron ciertas voces, tenía una prominente calva y una muy pronunciada barba en la cual ya se veían algunos cabellos blancos sus ojos medio abiertos eran cafés y su piel algo morena le faltaban tres dientes frontales y su ropa era una guayabera azul descolorida y unos pantalones caqui  – ya vete de una vez muchacho que tengo sueño - se quejo
- Esta bien Don Gregorio – dijo Cristóbal un poco ofendido -  ya me iba… y no fui yo, fue Yuri quien lo despertó
- quiero dormir y punto – gruño el hombre y cerró sus ojos de nuevo halo más su colcha y se tapo mejor con ella   

Ambos se miraron y dieron unas pequeñas risas que desaparecieron con otro gruñido de Don Gregorio, el chico salio rápidamente dejando a Yuri discutiendo con el hombre.
Siguió por una serie de pasillos sorprendiéndose de lo facil que seria perderse en ese lugar y lo fríos que eran los pasillos de aquella pirámide, llego por fin a la entrada que estaba empezado de anegarse de agua y fue en busca de Marius en medio de la lluvia  que pacientemente esperaba en el lugar convenido

- Hola, Marius  - saludo el joven al hombre rubio – se siente mejor.
- Si – se limito a contestar - ¿Cómo esta ella?
- no bien, porque ha sido complicado pero al menos ya dejo de luchar  por librarse.
- bien llévame con ella.
- esta seguro, no seria mejor que…
- no, por favor llévame Cristóbal
- Esta bien, como usted prefiera   

Caminaron silenciosamente bajo la lluvia, Cristóbal no quiso ser imprudente con Marius así que respeto su silencio y siguieron el camino a través de los pasillos y escaleras, al entrar en la recamara principal, fue a ella lo primero que vieron, estaba tan callada y silenciosa su cabeza descansaba colgando del lecho piedra con la vista perdida en el infinito y en su rostro aun recorrían lagrimas hasta llegar al suelo, al parecer hacia poco que había dejado de luchar;  sus brazos sangrantes, otros chamanes que el no concia estaban cuidándola susurrando

- ha tenido un día muy difícil – dijo entre susurros Cristóbal con un aire de tristeza
- No la han dejado dormir durante el día – pregunto Marius algo inconforme 
- ¡No! No podemos dejarla descansar, sino nunca la debilitaríamos, ella es muy fuerte y su voluntad casi inquebrantable, pero somos muchos y a la larga haremos que ella se rinda, y no hay otra forma, Marius – contínuo al notar en el inmortal un gesto de molestia debido al método que usaban – seria mejor para usted que saliéramos
- no, prefiero quedarme aquí, disculpa, pero es molesto saber que es torturante para ella y yo no poder hacer nada para apaciguar su dolor    
- si lo se, pero es la única forma, si ella no estuviera protegiendo tanto algo no seria difícil o tan fuerte seria mas fácil, ahora entiende el porque no es bueno que familiares presencien esta curación, no lo soportan e intervienen 

- quiero preguntarte algo
- Si, esta bien… venga vamos al cuartito de atrás, nos van a regañar si estamos hablando aquí

Cuando entraron la habitación estaba vacía, cuando Cristóbal se disponía a  sentarse, Marius pregunto  
- ¿es cierto que ella esta escuchando voces y pensamientos de otros vampiro y que eso evita a una mas su trabajo?
- si… como lo supo
- la anciana me lo dijo ayer
- si es cierto pero ya sabíamos que pasaría eso
- ¿Como? – dijo Marius fuertemente temiendo que su secreto fuera descubierto
- bueno, no dicen que ustedes pueden escuchar las voces de su gente aunque que este a miles de kilómetros a menos que sean sangre de su sangre
-…. Si es cierto, lo siento no quise exaltarme
- no se preocupe, es normal que este preocupado por ella, pero le aseguro que estará  bien
- tengo otra pregunta ¿Qué es la locura del chaman?
- a vaya, como supo de esas cosas… bueno le explicare – dijo emocionado por mostrarle su mundo al inmortal -cuando hay un futuro chamán se singulariza por su comportamiento extraño: se vuelve soñador, busca la soledad, vaga solo por bosques y parajes desiertos, tiene visiones aun despierto y sin ningún catalizador… usted sabe algún hongo, alucinógeno o hierva, canta durante el sueño, es muy feliz o muy desdichado cosas por el estilo. Este es un período de "incubación” por así decirlo también le llamamos "la locura de los futuros chamanes”, donde le precede un caos psíquico y significa que el “chaman” en cuestión está en trance de "disolverse" y que está maduro para adquirir una nueva personalidad nos nuevos ojos para ver el mundo como realmente es. Ha habido veces que algunos  dejan de respirar y otros han estado a punto de ser enterrados como Yuri el tipo rubio de cabello rizado. Solo se puede pasar de esta etapa cuando “este” yace inconsciente en la tienda o en la yurta o casa, la familia llama a un reconocido chamán que actuará como instructor que le imparte enseñanza secreta, muchas veces estando ambos en trance, espíritu con espíritu, es la conocida relación entre maestro y discípulo que se lleva a cabo en secreto, casi sin palabras, "de mi corazón a tu corazón” se dice, entre ellos nace una relación dependiente, el maestro le enseña a utilizar sus habilidades mientras las estabiliza en el discípulo quien aprende ha manejarlas a voluntad.

- un chaman viejo puede después de mucho tiempo de haber pasado por esto, pasar de nuevo ser neófito  -  pregunto de nuevo Marius
- ¿Como así?
- que necesite ser reiniciado de nuevo
- jajaj no creo, eso seria imposible… eso seria como si un vampiro  fuera re-vampirizado otras vez jaja…¿Por qué pregunta?
- Curiosidad
- pregunta rara
- y sabes quien se quedara con Mekare cuando le quiten sus dones
- mmm aun no, pero los únicos chamanes de agua son la Doña Carminda, Yuri y don Rafael lo lógico seria Rafael pero el se ha negado a estar con un vampiro, sin ánimos ofender – un suspiro salio del Cristóbal – lo ideal seria que mi padre fuera, el también usaba el elemento del agua, pero yo solo uso el de la tierra, así que no sirvo de mucho
- y eso que tiene que ver
- mucho, la Sra. Mekare es una chaman que utiliza el elemento agua, lo sabemos porque en sus historias siempre esta al lado de un río, esta lloviendo;  por lo que seria mejor que quien la guiara en su curación seria uno del mismo elemento.

- Hola – dijo una voz masculina muy vivaz perteneciente a Yuri– te toca Cristóbal
- Hee! Si ya voy – Cristóbal se fue un poco incomodo por no poder monopolizar el tiempo con Marius

Era Yuri que parecía más fresco que antes con una amplia sonrisa se presentó el solo a Marius… y entablaron muy rápida conversación, circunante a un enrramiento.

*_______*

En los días siguientes Marius realizó la misma rutina, despertarse llegar a la pirámide y observar el como ella se debatía entre sollozos silenciosos, arañazos a la piedra y agitaciones esporádicas que dejaban ver su dolor y en ningún momento le dejaban siempre había cuatro de ellos a su alrededor, en forme avanzaba el tiempo, Marius se sentía inexplicablemente mas cansado, con una opresión en el pecho que se acrecentaba al estar cerca de la desdichada pelirroja pero sobre todo una inexplicable tristeza que invadía su ser; haciendo caso omiso a las molestias siguió estando cerca de ella al menor creía haber compartido en cierta forma parte de su sufrimiento.

El pensaba que después de todo esta fatalidad conocería a la verdadera Mekare, y ella seria libre de ir y venir, de pensar, sabia que no podria ser la criatura iracunda que había conocido pues su principal rencor ella mismazo había desaparecido, pensaba que ella seria inteligente y tal vez llena de sabiduría, que le contaría tal vez de alguna manera que habría tenido una vida muy  difícil sola, sin otro inmortal cerca, o tal vez que habría engendrado a otros inmortales; como lo había hecho su hermana, mas bebedores de sangre, motivada por su soledad o curiosidad, pero siempre que llegaba a este punto se enojaba al preguntarse ¿donde estaban? Porque no habían acudido al momento de que ella despertó y mando sus mensajes sus memorias a muchos de ellos, podían haberse enterado e ir en su ayuda, pero eso nunca paso, tal vez ya no existía ser que la conociera durante los siete mil años que estuvo separada de su hermana, tal vez ahora ella contestaría sus preguntas…Mekare ser tan misterioso eso era ella.  

Marius aprendió poco a poco la lengua que los chamanes usaban para comunicarse entre si, era muy sencillo pero muy completo, también supo que era el mismo lenguaje escrito en las paredes del salón pero nadie conocida su significado ya que se había perdido el conocimiento de  poder leerlo cuando los europeos invadieron sus tierras quemando  sus escrito y matando al que lo conocía pero conservaron en las familias de curanderos el lenguaje antiguo.

Marius también halló consuelo en esas largas noches en Cristóbal que era un joven con mucho encanto e inocencia y siempre sabia levantar su espirito; también disfrutaba de la compañía de Leila que había regresado a la normalidad a pesar que nunca volvieron a tocar el tema; y Yuri quien era un hombre vivaz e inteligente  que concia mucho temas para tener una charla amena.
También podía sentir la mirada inquisidora de la Sra. Carminda que no volvió a dirigirle la palabra sin embargo le sonreía el buenas noches de Andrés.
De los trece era los únicos que parecían tolerar la presencia del inmortal los otros no le ignoraban totalmente y Tiaho se hacia sentir su inconformidad cada vez que le veía, al parece era de los que hubieran dado cualquier cosa por no estar allí, pero hacia su trabajo con dedicación y esmero eso hablaba muy bien de él.

Después de casi un mes y medio agotador para todos, Marius despertó una noche con un malestar terrible una ansiedad que se acrecentaba en su interior como fuego, afuera caía un vendaval que amenazaba con arrancar las grandes árboles de su sitio, al llegar al río Cristóbal no estaba espero bajo la lluvia y oyó en su mente llamado del chico que esperaba dentro de la pirámides   allí estaba el chico muy emocionado diciendo que tal vez esa seria la noche dentro del salón  había mucho revuelo los trece chamanes estaban allí al rededor de ella casi como el primer día y Mekare pero llena de ira se agitaba y contorsionaba luchando contra ataques invisibles que le mandaban todos los chamanes   a la vez.  

Marius vio en ella esta vez un destello diferentes en sus ojos verdes que hizo que le corriera un escalofrió por la espalda, ella le miraba directamente a los ojos… y de pronto se sintió arder de cólera y sentirse gritar a todo pulmón llamando a Amadeo sentía su piel arder en llamas y escuchar a sus pupilos llamarle para que el los salvara y cayo sumido de nuevo en el piso del salón, las imágenes de las personas a su alrededor se tornaron borrosas y los sonidos lejanos poco a poco callo en una oscuridad que descanso su espíritu

*_______*

Cuando Marius despertó, una penumbra total caía sobre él, aunque sus ojos estaban abiertos no había diferencia alguna, donde se encontraba Mekare fue su primer pensamiento y no lo sabia, se levantó y noto que estaba tendido en una especie de nido de hojas frescas de un olor que no pudo reconocer pero no le desagrado, se paro con cuidado no sentía dolor alguno pero su cuerpo estaba adormecido, nunca antes había sentido una sensación como esta, con dificultad pudo dar un par de pasos y no había ningún obstáculo cerca de él, intento sentir a su alrededor alguien o algo pero no había nada mas allá  que la oscuridad, o al menos eso parecía, dio unos cuantos pasos y llego a una pared, su tacto sintió que estaba hecha de piedra violentamente tallada, dio un golpe con la fuerza que pudo y no hizo nada mas que un pequeño agujero en la incólume roca, así que siguió caminado sin dejar de tocar la pared no hubo caminado mucho cuando sintió el agujero que había, estaba en una especie de pozo, así que subió por ella como solo lo hacen las criaturas como él, aunque eso le requirió de toda su concentración siguió subiendo pero cada vez que subía un poco mas se sentía mas cansado y su cuerpo resultaba pesado muy pesado, esto seria un hechizo 

Se concentro todo lo que pudo, dejando a un lado todo lo demás puso una pared en su mente que bloqueaba cualquier cosa del exterior y cuando abrió los ojos estaba en la habitación pequeña que estaba al lado del recinto donde Mekare pero había una enorme pared donde debía estar la puerta, su único pensamiento era Mekare, uso de su fuerza milenaria para derribar la pared pero esta cedió poco a poco, cuando estuvo fuera corrió por el pasillo que estaba anegado de agua cristalina cuando entro el salón este era irreconocible la fría  lluvia caía sobre él, el techo abovedado había desaparecido dejando ver el cielo lleno de nubes y relámpagos que iluminaban el recinto en el piso había una serie de cadáveres desechos y la final entre la luz de un relámpago pudo ver la figura de un mujer alta de cabello rojo que sus ojos verdes destellaban  furiosamente mirándolo y con una velocidad sorprendente llego hasta el propinándole un monstruoso golpe que le mando lejor  encajando en una de las paredes haciendo añico sus huesos cuando trato de levantarse sintió su cuerpo sobre el suyo y sus dientes en su cuello le levanto salvajemente por la pared como un muñeco sobre ella derramando su liquido vital en su boca, se quedaba ya sin fuerzas intento forcejear pero era inútil ella poseía una fuerza colosal que le vencía, poco a poco su cuerpo de adormecía dejándolo en una paz completa como morirían sus victimas el también lo haría  en ese lugar.

Fin 4to Capitulo Continuará

Sigue leyendo Cap. V

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